Análisis de partidos
Columnas
J. Correa
Kranevitter
Sampaoli
EL COMIENZO DE LA ERA SAMPAOLI
El nuevo técnico sevillista puso en la palestra, ya el
primer día, algunas de sus ideas básicas: la defensa de tres centrales, el
mediocampo en rombo y los extremos a pierna cambiada. Pero no fue, como es
normal en él, esclavo de su sistema y probó variantes en doble pivote o con
defensa de cuatro atrás. La era Sampaoli
se iniciaba con un 1-3-4-3 de corte Cruyffista- como me comentaba Felipe Araya (@Felipeavr en Twitter)- donde Kranevitter era lo más destacable a nivel individual en el primer tiempo
ejerciendo de pivote único. El argentino dejaba patentes sus características: juego fácil-batiendo líneas en más de una
ocasión- y mucha tendencia a la presión y a defender hacia adelante, aunque sus
compañeros no le acompañaban siempre y eso no supo terminar de entenderlo. Ya
comentó en rueda de prensa Sampaoli que es necesario que trabaje en ello para entender este modelo de juego al que no está habituado.
Sorprendía también Iborra en el vértice superior del rombo,
jugando muy a lo Bakero en el Dream Team, apariciones en zonas intermedias para
hacer descargas a un toque y atacar el área desde segunda línea- ¿veremos aún una
nueva adaptación de Vicente en su juego desde la mediapunta?, ahí queda la
pregunta-. La presencia en la segunda parte de Correa en esa posición también
llamó la atención en lo individual, pero por un comportamiento diferente. El tucumano
mostró una velocidad en el giro que Iborra no tiene y una capacidad para
asociarse hacia adelante y activar a sus compañero de ataque que gustaron
bastante.
Pese a que el Sevilla tuvo buena actitud y gustó por
momentos mucho, queda todavía mucho trabajo por hacer-como no podría ser de
otra forma-. La presión adelantada se mostró desorganizada en muchos momentos,
unos van otros quedan y el equipo no subió conjuntamente, en posesión de balón
el equipo fue más vertical de lo que terminará siendo y la línea de tres
defensas se mostró bastante desorganizada en muchas fases del partido, con
problemas a su espalda o defendiendo centros laterales, y dejando cierta distancia entre líneas que se irá
corrigiendo.
Como bien comentó Sampaoli al final del encuentro, buenas
sensaciones, actitud en los jugadores pero la idea todavía tiene que
asimilarse e interiorizarse. Es demasiado pronto para que ya lo
estuviera, por lo que no es nada preocupante que existan muchos desajustes. El Sevilla mejorará con el
trabajo, pero su presentación puede decirse que fue más que positiva.
Comentar